Hoy palabras que van, que vienen, palabras con un símil de
navajas, afiladas, dentadas, aquellas que sólo penetran en mi corazón, en mi
alma, que al quitarlas dejan heridas profundas, horrendas, sangran cual grutas
en las montañas.
Hoy sólo quedan palabras, sentimientos ya no sé,
significados, sinónimos, no creo, creo que todo aquello ya se fue.
Miradas buscadas, anheladas, soñadas, apasionadas esas ya no
las encontré, solo aquellas miradas frías e indiferentes que matan a cualquier ser.
Ser, ese ser, que ayer fui pero mañana ya no seré, ser que
dentro de mi hoy palpita, es un ser, es mi bebé.
Grande es la necesidad de sentir ser amada como alguna vez,
en un tiempo pasado, donde fui feliz, amada, amada.